Diseñada para una familia joven que buscaba amplitud y luminosidad, Villa Horizonte se erige en una parcela de 600 m² con vistas despejadas hacia la sierra. Su arquitectura combina líneas rectas, volúmenes cúbicos y amplios ventanales que conectan el interior con el jardín.
El sistema constructivo en madera industrializada EcoFrame permite grandes luces sin pilares intermedios, creando un salón-comedor de más de 50 m² totalmente abierto. La envolvente de fachada en tonos grises y madera natural aporta equilibrio entre modernidad y calidez.
Una vivienda eficiente, tecnológica y contemporánea, pensada para disfrutar dentro y fuera.